La fábrica de la tele sigue recibiendo sentencias en su contra desde que Óscar Cornejo y Adrián Madrid se desvincularan definitivamente de Mediaset y vendieran sus acciones al grupo. Tras tener que indemnizar con 160.000 euros a Raquel Bollo y 800.000 a Alfonso Merlos, por el "Merlos Place", ahora ha sido María del Monte la que ha ganado una demanda.
Así, este viernes hemos sabido que La fábrica de la tele tendrá que indemnizar a María del Monte con 200.000 euros. En este sentido, cabe decir que la Audiencia Provincial de Sevilla ha desestimado el recurso de apelación de La Fábrica de la Tele y ratificado la sentencia que ya impuso el Juzgado de Primera instancia número 16 de la ciudad hispalense.
Esta sentencia dicta que 'Sálvame' cometió "intromisión ilegítima en el derecho al honor y la intimidad personal" en los programas 'Sálvame Limón', 'Sálvame Naranja' y 'Sálvame Tomate' los días 15 y 16 de febrero de 2021 pues se trató "información no verificada y respecto de actos relativos a la vida privada e intimidad de la demandante" según ha adelantado OK Diario.
Por si fuera poco, según se recoge, 'Sálvame' se hizo eco de un bulo. "No puede calificarse de información, sino de simple espectáculo sin interés informativo dirigido al entretenimiento de la audiencia, mediante el escarnio, burla, insultos y atentados a la dignidad", recalca la sentencia.
El hecho de que la indemnización se haya estipulado en 200.000 euros es sobre todo porque el programa que presentaba Jorge Javier Vázquez cayó en una reiteración. Además, la productora tendrá que pagar las costas judiciales del proceso.
Otra de las condiciones que tiene que cumplir Mediaset es leer la sentencia en directo. Al estar 'Sálvame' cancelado, la cadena tendrá que hacerlo probablemente en 'Así es la vida' y/o 'TardeAR' pues según se recoge Telecinco tendrá que leer dicha sentencia "en los mismos espacios o programas que los sustituyan y en horario de máxima audiencia".
No es la primera vez que María del Monte le gana una demanda a 'Sálvame'. Ya lo hizo en 2014 cuando la artista denunció al programa por hablar sobre sus relaciones sexuales y considerar que habían atentado su derecho a la intimidad. En aquella ocasión la productora recurrió la sentencia que llegó al Tribunal Supremo, que fue quien la condenó a pagar 50.000 euros a la cantante.
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