Rafael Amargo ha reaparecido en 'Espejo Público' denunciando a los culpables que hay detrás de su imputación por dos presuntos delitos
A principios de 2020, coincidiendo con el estreno de su producción 'Yerma', Rafael Amargo fue detenido, acusando de dos presuntos delitos. Por un lado, de organización criminal y por otro de tráfico de drogas. Tras ser puesto en libertad, el coreógrafo comenzaba una guerra contra quienes considera que estaban detrás de su acusación. Pero también contra todos aquellos que ponían en tela de juicio su inocencia.
Un año después, en 2021, la Fiscalía de Madrid pedía nueve años de prisión para el bailarín por un delito contra la salud pública, al considerar que vendió drogas en su propio domicilio a terceras personas de manera "persistente" a cambio de dinero.
En estos momentos, Rafael Amargo está a la espera de juicio. Y mientras éste llega, ha estrado su nueva obra, 'The Beautiful Dream of Life'. Una obra con tintes autobiográficos que ha presentado este jueves 4 de agosto en 'Espejo Público'. Diego Revuelta se ha desplazado hasta el teatro para entrevistarle, y Amargo no ha dudado en reconocerle los duros momentos que está atravesando.
"A día de hoy todavía no me han dado el pasaporte. Cuando te pasa una cosa así tienes que confiar en ti, saber tu verdad, que eres el único que la sabe. Con el tiempo, sé de personas que tenía a mi alrededor, que pensaba que estaban lejos, las tenía más cerca. Me refiero a dos manos negras. Cuando empieza esta investigación sé a ciencia cierta que es cerrando otra a cambio de esta, son capaces de cualquier otra", asegura el artista al reportero de 'Espejo Público'.
Amargo advierte: "Si me pasa algo, que sepan que yo ya lo sentía"
A la pregunta de Revuelta a si tiene miedo porque, ahora que está de estreno, pueda volver a verse salpicado por el escándalo judicial, Amargo lo tiene claro: "Por eso mismo me he adelantado, si me pasa algo que sepan que yo ya lo sentía. Más vale prevenir que curar. El juicio no tengo ni idea de cuando saldrá, pero tengo ganas para poder seguir con mi ritmo de vida. yo el 80% del trabajo que tengo lo tengo en el extranjero, y ahora no puedo salir del país. Así buscan que me muera de hambre y tenga que pactar".
No obstante, el coreógrafo no tiene miedo al proceso judicial: "No he pensado en acabar en la cárcel porque no he hecho nada, pero si llevan 200 testigos falsos y montan algo… pero no me da miedo, porque al final igual estas personas ya no están ejerciendo en política. El problema es que cuando acaban en la política, son humanos. Meto a la política por delante porque es un tema político, un encaprichamiento de ciertas personas conmigo. Lo que tengo claro es que con esto han querido tapar algo, otra cosa".
Esto le ha servido para darse cuenta de quiénes son sus amigos
Lo único bueno que ha tenido todo esto, es que le ha servido a Rafael Amargo para saber quiénes son sus amigos y quiénes estaban solo por interés: "Yo con mis amigos tengo afecto de verdad, pero no les apunto todo porque tengo una vida propia muy plena, me lo paso muy bien solo o con pocos amigos. Por eso no los he echado tanto en falta. A lo mejor sí he notado que si pueden evitarme, me evitan".
"Eso me duele el doble por prejuzgarme y porque lo hacen por si acaso, pero ellos realmente me conocen y saben como soy. Aun con todo, me quiero quedar con los amigos que pensaba que tenía más lejos y han estado muy cerca. He descubierto muy buenos amigos con este caso", sentencia el bailarín.
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