Ana Obregón ha reaparecido en televisión, concediendo una emotiva entrevista a Anne Igartiburu en 'Corazón'.
Era el regreso más esperado. Seis meses después del fallecimiento de su hijo, Álex Lequio, Ana Obregón ha reaparecido este sábado 28 de noviembre en televisión, concediendo una sincera y emotiva entrevista a Anne Igartiburu en 'Corazón'.
Juntas presentarán las Campanadas de TVE. Por primera vez, dos mujeres despedirán el año para la cadena pública desde la Puerta del Sol. Algo con el que Ana se muestra encantada. "Me hace mucha ilusión que seamos dos mujeres. Creo que es un homenaje a todas las mujeres de España. Dos Anas, dos madres. Van a ver que las mujeres valemos, tenemos pode, tenemos corazón, sensibilidad. Van a ver un mensaje de esperanza y mucho amor".
"Hoy me he levantado con la fuerza que me ha dado Álex"
Y es que, si algo ha dejado claro la actriz, es que ella sigue siendo madre "hasta el día que me muera". Unas palabras que han sobrecogido a todos. Además, ha desvelado que ha sido el primer día que no ha llorado al levantarse. "Es el primer día que me despierto y no lloro porque ya es imposible parar…". Aunque reconoce que es bueno llorar, porque "las lágrimas son sanadoras".
"Hoy me he levantado con la fuerza que me ha dado Álex. Brutal. Ahora estará diciendo: 'Bravo, mamá, trabaja'", ha asegurado con los ojos brillantes por la emoción. Y es que, Ana siempre ha reconocido lo importante que es para ella la fuerza y la energía que le manda su hijo.
Cuando solo queda un mes para empezar un nuevo año, la presentadora cree que en el 2021 se ve "viviendo una nueva vida porque ya nunca seré la misma". Eso sí, lo hará con el recuerdo de Álex siempre presente. Además, afronta el próximo año con mucha ilusión, porque lanzará la fundación en honor a su hijo, en la que trabajará en la lucha contra el cáncer.
Ana también ha querido recordar a todas las personas que han perdido a seres queridos este 2020. "Desgraciadamente ha sido un año muy difícil para todo el mundo, no solo para mí. Hay 60.000 familias que han perdido a un ser querido por el coronavirus y 200.000 que han perdido a alguien por el cáncer. Se van a identificar conmigo, si les doy un mensaje de esperanza me doy por satisfecha".
Y concluía con unas emotivas palabras pero cargadas de esperanza. "Estoy segura de que verán que un corazón aunque esté roto , está lleno de amor".
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