La granadina de 10 años se ha impuesto a la pequeña María en el gran duelo final y se ha alzado con la victoria.
'Masterchef Junior' ya tiene a su ganadora de la quinta edición. Tras una final en la que hemos podido comprobar como el nivel de los niños cada vez es mayor, Esther ha conseguido imponerse a María en el gran duelo final y se ha convertido en la quinta ganadora de 'Masterchef Junior' relevando así a Paula.
Con este triunfo, Esther se lleva a su casa el trofeo que le proclama como nueva "Masterchef", 12.000 euros de premio que serán destinados a seguir formándose como chef y un curso de cocina en el Basque Culinary Center de cuatro días.
No hay sueños imposibles, siempre que se persigan con esfuerzo e ilusión. Esther, la aspirante granadina que ha conquistado a todos con su ternura, su serenidad y sus guisos tradicionales, ha sido proclamada como la nueva ganadora de MasterChef Junior, en una apasionante final en la que ella y su compañera María han dado una lección de trabajo y compañerismo.
En el gran duelo final no eran dos rivales, sino dos amigas que no pararon de darse ánimos y abrazos tras cada valoración del jurado. “Estamos muy orgullosos de vosotras. Nos habéis demostrado una extraordinaria evolución desde que pisasteis, por primera vez, estas cocinas. Tiene mucho mérito que dos niñas de 9 y 10 años hayan hecho estos menús espectaculares y que lo hayáis ejecutado tan bien. Felicidades a las dos”, destacó el jurado en la final de MasterChef Junior, que se emitió anoche en La 1 y que fue seguida por más de 3 millones de espectadores y un 23,3% de cuota, máximo de las ediciones infantiles del talent.
Cuando se apuntó al casting, Esther jamás pensó que llegaría tan lejos ni que bromearía con abrir un restaurante con el chef Dabiz Muñoz (tres estrellas Michelin), el gran invitado de la final. “Me parecen muy chiquititas, en todos los aspectos, y unas fuera de serie ya solo por hacer lo que están haciendo y cómo lo están haciendo”, dijo Dabiz Muñoz de las finalistas, que le dejaron con la boca abierta. “Es sorprendente que una niña de tu edad haga platos como este. Creo que solamente se entiende porque programas como MasterChef divulgan la gastronomía y generan muchos conocimientos en gente muy joven. Es el resultado del trabajo de estos jueces y del equipo. No es normal que una niña de diez años haga algo así”, destacó.
En el futuro, a esta pequeña granadina le gustaría abrir su propio restaurante, con estrella Michelin, y regresar como una reputada chef a las cocinas donde consiguió anoche la victoria.
“Este trofeo es el esfuerzo por haberme dejado la piel, haber competido con compañeros que eran muy buenos, y aquí está, lo que demuestra que he trabajado bien. Lo más importante que me ha enseñado MasterChef Junior es que trabajando duro se puede conseguir todo y que hay que esforzarse”, dijo Esther, sin terminar de creer que había ganado. Además del trofeo, consiguió el cheque con los 12.000 euros para su formación y un curso de cuatro días de duración en Basque Culinary Center para desarrollar sus habilidades culinarias.
“Esther, te hemos visto muy concentrada durante todo el cocinado, aplicada como una hormiguita, has trabajado mucho y muy bien. Todo estaba muy bueno y nos han encantado tus emplatados. Porque Dabiz Muñoz te ha visto emplatar aquí, si no creo que le costaría mucho comprender que lo ha hecho una niña de 10 años”, comentó el jurado minutos antes de proclamar la vencedora de la noche.
En segundo lugar se quedó María, quien también dejó con la boca abierta al jurado. “María, tu trabajo también nos ha encantado porque hay una gran evolución. ¡Cómo has usado las técnicas de vanguardia! Viendo las multiesferas nunca diríamos que tienes 9 años”, señalaron.
Dos menús con mucha técnica y sabor
Durante el cocinado de la gran final, Esther y María estuvieron muy nerviosas porque sabían lo que estaba en juego. A Esther se le cayó el toffee de su postre y se vino abajo al pensar que todo le estaba “saliendo mal”, hasta que Jordi se acercó a tranquilizarla. Dabiz Muñoz también tuvo que echarle una mano a María, cuando se le cortó la emulsión de queso de su entrante. A pesar de los nervios, el jurado les dio la enhorabuena y reconocieron estar “muy orgullosos de las dos por diseñar dos menús muy arriesgados llenos de técnica y de sabor.
De entrante Esther cocinó un canelón de aguacate, un plato “espectacular” que puso “los pelos de punta a Dabiz Muñoz”, como bromeó Pepe Rodríguez. “Estéticamente es un plato digno de cualquier restaurante de lujo. Cuando pruebo estos platos pienso: ‘menos mal que tenemos ex aspirantes y padres que están viendo cómo cocinan’, porque si no no me creería que este plato lo has hecho tú. Es increíble cómo está de bonito y de bien aliñado”, señaló Samantha Vallejo-Nágera. “Esther, hay una parte técnica que está impecable. A nivel de sabor, es fresco, todos los sabores están bien definidos y, lo más importante, está muy rico”, le felicitó Jordi Cruz.
El plato principal era salmón con cítrico y salicornia, que estaba “perfectamente acabado”. “A mí me colocas en una situación muy complicada. Cuando veo un plato como este, me lleva a hablarte como un profesional y eres muy pequeña. No tiene defectos, es un plato singular y lo ha hecho un niño. Es un milagro”, dijo Jordi Cruz por el increíble nivel del trabajo presentado.
Para finalizar, preparó una mousse de nueces, bizcochos y toffee, el “postre de la discordia” que le costó un disgusto durante su elaboración y que, al final, presentó con mucho orgullo por el buen resultado que tuvo. “Me he arriesgado un poco con el nitrógeno, pero era una noche para apostar”, reconoció Esther. “Está para llorar, porque está muy rico. Yo de pequeño me hacía una leche caliente con un poquito de grosella y el centro de este postre me recuerda mucho a eso. Es una gran virtud que un plato te transporte a momentos bonitos de tu vida”, destacó Jordi Cruz.
Su compañera María también realizó un trabajo estupendo, aunque el jurado encontró algún que otro. Su menú estaba compuesto de carpaccio de manzana con alcaparras, piñones y shots de mostaza, que para el jurado era “maravilloso como snack, pero como plato le falta algo más”. “Yo lo único que creo que deberías de haberle puesto es un poco más de salsa de queso y un poquito más de shots de mostaza. Por lo demás, me parece que esta precioso”, rebatió Dabiz Muñoz para no desanimarla.
Para el principal arriesgó con multiesferas de Vichyssoise con vieira y aire de limón, y consiguió una vieira marcada en su punto justo. “El concepto del plato es brillante. Independientemente de la técnica usada en la multiesfera, que me parece alucinante que una niña como tú sea capaz de hacerlo, me parece que es espectacular y como ejecución un diez”, dijo Dabiz Muñoz. “Es la interpretación de la alta cocina de un plato tradicional, llevado incluso a la sofisticación”, subrayó Pepe Rodríguez.
De postre preparó una mousse de chocolate con cúpula de chocolate, frambuesas y espéculo, que Pepe Rodríguez Rey sacó algún fallo. “Aquí nos ha fallado un poquito la técnica, es verdad que la cúpula debería ser más finita. Podíamos haber tratado la fruta, para que hiciera el postre más fresco. Quizás todo sea culpa de ese grosor del chocolate. La idea es buena”, destacó el juez. “Has hecho dos platos de persona mayor, tan modernos que nos pueden parecer más arriesgados y este es un poco más sencillo. Pero tiene mucho mérito”, le consoló Jordi Cruz.
“Es verdad que no es el postre más espectacular de mi vida, pero tampoco me hace falta. Para una niña como tú el postre está de diez”, le valoró Samantha Vallejo-Nágera.
A pesar de no haber ganado, para María llegar a la final ya era una meta alcanzada. “MasterChef Junior ha sido todo. Risas, experiencias, lágrimas... sobre todo he conocido a muchos amigos. Era muy difícil ganar, pero mi sueño está cumplido. Llegar a la final era un privilegio que poca gente podía tener”, dijo María tras quedarse en segunda posición.
Gonzalo y Lucía se quedaron a un paso
Esther, María, Lucía y María tenían un duro viaje para alcanzar la final. En el primer reto, cocinaron siguiendo los pasos de Dani García (dos estrellas Michelin). Lucía no fue capaz de seguir los pasos del chef, a pesar de la ayuda de su compañera Esther, a quien preguntaba constantemente. Quien también falló por no escuchar fue María, que fue “por libre” según Dani García, porque se adelantó y no siguió al pie de la letra sus indicaciones.
Esther y Gonzalo realizaron los mejores trabajos, aunque el madrileño no arriesgó a la hora de incorporar al plato de Dani García el ingrediente secreto que le había tocado: la almeja. Solo utilizó el agua de cocer las almejas, y no su carne, para hacer el puré. En cambio, Esther brilló al utilizar la vainilla en el escabeche de foie gras. “Hoy era sencillo valorar tu trabajo, porque Dani García lo ha explicado de una forma muy clara, se veían todas las elaboraciones, las proporciones de cada elaboración y tu trabajo ha sido muy parecido al suyo. Incluso me parece muy bien incorporada esa vainilla, que le da esos puntos de dulzor. Quizá Dani se planté ahora ponerle vainilla al plato”, bromeó Jordi Cruz.
En la última prueba exterior de la temporada, el jurado preparó una celebración muy especial. En el palacio del Infante don Luis (Boadilla del Monte) invitaron a comer a los doce aspirantes de la segunda edición de MasterChef Celebrity. Gonzalo, Lucía y María tenían una segunda oportunidad para ir al gran duelo final de MasterChef Junior y el reto no era sencillo: elaborar dos platos de un menú degustación diseñado por Pepe Rodríguez Rey. A pesar de conocer los pasos, Lucía se mostró muy nerviosa y perdida desde el comienzo, lo que le hizo cometer muchos fallos que superó gracias a la ayuda del jurado. Gonzalo no aprovechó bien su ventaja para escoger primero los platos y tomó una mala decisión que le costó el pase a la final. Aunque trabajó muy duro, los nervios se apoderaron de él.
La más pequeña de los tres candidatos, María, brilló durante toda la prueba. Desde el primer momento trabajó con rapidez, energía y muy concentrada. Su don con los postres le sirvió para sacar sus platos a tiempo y con muy buen resultado. Gracias al excelente trabajo realizado, consiguió la chaquetilla y el pase al duelo final contra Esther.
Líder de audiencia y mejor cuota de las 5 temporadas
La final de la quinta edición ‘MasterChef Junior’ fue lo más visto este miércoles, récord histórico en cuota de pantalla y maximo de esta temporada. Una media de 3.039.000 espectadores, 23,3% de cuota, estuvieron pendientes de los cuatro finalistas y del triunfo de Esther. El programa lideró las franjas de prime time (15,5%) y late night 22,1%). Hasta 6.033.000 personas vieron algún momento del último programa de esta edición.
El minuto más visto de la final fue a las 23:11 horas, con 3.507.000 telespectadores y una aceptación del 19,7%, en el momento en el que Pepe Rodríguez presenta su menú para los niños.
La quinta temporada de ‘MasterChef Junior’ ha logrado una media de 2.370.000 espectadores y un 16,2% de cuota.
Casi 16 millones de personas (15.975.000), el 35,8% de la población, han visto algún momento de los seis programas de esta edición.
El miércoles, La 1 lideró el día con un 13,3% y se impuso en las franjas de prime time (15,5%), late night (22,1%) y sobremesa (13,4%).
Además, la última entrega repitió éxito en redes sociales, donde las etiquetas #MCJunior y #Masterchef volvieron a estar entre las más comentadas.
Sigue toda la información de El Televisero desde Facebook, X o Instagram