Crítica de la semana: El dinero no es lo más importante, pero ayuda

ANÁLISIS | Semana del 15 al 21 de noviembre de 2021

El dinero mueve el mundo, pero si no hay un poco de alama nada funciona solo a base de talonario. La televisión requiere de personas, de cabezas pensantes y equipos humanos que funcionan más allá de los grandes presupuestos. La fórmula del éxito no existe, no hay una cantidad justa de ingredientes para conseguir la receta perfecta, pero sí que hay dos elementos que si convergen auguran audiencia: el talento y el dinero.

Probablemente es el formato más caro que se emite actualmente en la pequeña pantalla española, pero sus resultados de audiencia bien lo compensan. ‘Tu cara me suena‘ en su novena edición es el rey absoluto de los viernes. Ya van tres semanas seguidas comiéndose a ‘Got Talent’, un rival duro de roer, y esto hace del programa de Manel Fuentes uno de los valores más seguros de la televisión contemporánea. El viernes ampliaba la distancia con su principal competidor alcanzando un excelente 22,7% de share. 

Saber adaptarse a los tiempos sin perder un ápice de su esencia es el gran eje sobre el que pivota el éxito de ‘Tu cara me suena’. Es capaz de reunir a toda la familia con algo aparentemente tan sencillo como un karaoke de famosos venidos a menos. El programa nos traslada a los grandes espectáculos de la televisión noventera. No incomoda ni transgrede, pero entretiene. Lo digo, no es mi programa favorito del mundo mundial, nací viejo y ‘Tu cara me suena’ es una parque de atracciones repleto de payasos, pero tengo que reconocer que le encuentro el gusto muchas veces a sus actuaciones «más serias», y a la no tan inocente competitividad entre concursantes.

«Parece que que ‘Got Talent’ en su batalla con ‘Tu cara me suena’ tiene muy complicado cambiar las tornas»

Pero no solo ahí reside su grandeza, a todo esto le acompaña una gran apuesta de producción para conseguir que un formato se convierta en un gran espectáculo televisivo. El formato tiene alma y cuerpo, está todo perfectamente bien hilado, y a la vez, vestido con luz y color para que el espectador quede narcotizado simplemente con tanto estímulo visual. Se nota que hay dinero y equipo detrás, y que probablemente estamos delante del mejor trabajo de producción de la televisión actual.

En la otra cara de la noche del viernes nos encontramos a ‘Got Talent‘. Hay dinero, algo menos, y también ingenio, pero los resultados de audiencia no son todo lo satisfactorios que cabría esperar de un programa que lleva años arrasando. No es un fracaso, esta semana el programa de Telecinco se conformaba con un 15,9% de share, pero parece que en su batalla con ‘Tu cara me suena’ tiene muy complicado cambiar las tornas.

A ‘Got Talent’ le ha faltado principalmente tiempo entre edición y edición. Tiempo para encontrar talento en el escenario, actuaciones que realmente sorprendan y no sean un mero pasatiempos. Algo que resulta muy evidente observando la calidad artística de sus pases de oro, que por mucho que los miembros del jurado quieran revestirlos con frases grandilocuentes, no logran la trascendencia que requiere cualquier espectáculo televisivo que se precie. Tampoco ha ayudado prescindir de un miembro del jurado durante sus audiciones, Paz Padilla aportaba la imprevisibilidad y la emoción que les falta al resto de miembros. Si ella no volvía era necesario encontrar un recambio a la altura para subsanar su baja.