'Mía es la venganza' se enfrenta a su segunda semana en la parrilla de Telecinco y en el sexto capítulo emitido este lunes la serie ha dado un salto argumental grande en la intrigante trama de Sonia Hidalgo (Lydia Bosch) y Mario Costa (José Sospedra). El joven de mantenimiento de 'Los Olivos' quiere vengarse de la dueña del exclusivo club por la trágica muerte de su hermana y su madre.
Un plan que empieza ejecutando poco a poco. Primero, haciéndole llegar una fotografía como ya vimos la pasada semana y, ahora, con un misterioso paquete en cuyo interior alberga el mismo jersey que llevaba su hermana el día en el que murió ahogada. Así, Sonia vive en una constante agonía provocada por esa persona que la está extorsionando con sus dolorosos recuerdos del pasado.
Sin saber que al enemigo le tiene muy cerca, contrata los servicios de un detective privado, Montes, para intentar dar con la persona que la está acosando y que quiere hundirle la vida. De primeras, las cámaras de vigilancia de los alrededores del club muestran a la persona que dejó el anónimo para Sonia en ‘Los Olivos’, pero por desgracia las imágenes no permiten identificarle.
No obstante, Montes, un policía corrupto y capaz de todo, hace todo lo posible para lograr imágenes efectivas recurriendo a las cámaras de tráfico. Y, a priori, parece haber dado en el clavo. En el final del episodio de 'Mía es la venganza' de este lunes Sonia recibe la llamada de su esbirro asegurándole que han dado con el susodicho: "Ya es nuestro".
Por si no fuera suficiente, en el avance del capítulo de mañana martes, Sonia vuelve a recibir otro sospechoso paquete y Sonia Hidalgo no puede esperar más y exige a Montes que le lleve hasta el club al hombre que han identificado como responsable. En el adelanto se ve al presunto culpable maniatado y con Sonia mirándole fijamente y desafiándole: "Ponme a prueba". ¿Se tratará realmente de Mario? ¿O habrán secuestrado a la persona errónea?
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