Paloma García-Pelayo se ha pronunciado con firmeza del distanciamiento de Rocío Carrasco y Ortega Cano en 'El programa de Ana Rosa'.
'El programa de Ana Rosa' ha tratado con Paloma García-Pelayo, Cristina Tárrega o Marisa Martín Blázquez la polémica en torno a las joyas de la Jurado que Gloria Camila y Rosa Benito ponían de relieve en 'Ya son las ocho'. Ambas señalaron que, en ese sentido, la herencia de la artista favoreció a Rocío Carrasco. Esta última fue la heredera única de ese tesoro y Joaquín Prat lo apuntaba muy bien: "Rocío Jurado tuvo tiempo de pensar mucho en su herencia y decidió que esas joyas las tuviese su hija Rocío Carrasco". De manera que, si no le dejó nada a Gloria, es porque así lo quiso.
Además, también se ha colocado el foco sobre Ortega Cano a raíz de la encendida queja expresada por su hija en el programa de Sonsoles Ónega. Y es que Camila no entiende que su padre no aparezca en los homenajes que organiza su hermana y que ni siquiera se le mencione pese a haber formado parte importante de la vida de la cantante extinta. Un portazo manifiesto y un alejamiento indiscutible por parte de Rociíto hacia el torero sobre el que García-Pelayo tiene una respuesta muy clara.
"Es cierto que fue una historia de mucho amor y eso es imposible borrarlo. Está ahí en su vida y así es. Otra cosa es que Rocío Carrasco tenga razones para, no borrarlo porque es imposible, pero sí apartarlo de su vida como ha hecho y como ella misma se ha pronunciado. No quiere tener nada que ver y ningún recuerdo de ello", ha empezado diciendo la tertuliana en el magacín matinal de Telecinco.
"El gesto me parece absolutamente contrario. Había muchas razones para que Antonio David no apareciera en la boda de Ortega Cano y Ana María Aldón"
"Y yo creo que tiene sus razones. Estoy de acuerdo con la teoría de que por supuesto sobraban Antonio David Flores y Olga de la boda de Ortega Cano y Ana María Aldón. Cuando se celebra la boda en septiembre de 2018, el 27 fueron a un notario y luego tres días después fue en una finca de Sanlúcar de Barrameda, fueron invitados los niños (Rocío y David). Los niños es perfecto si quieres conciliar con ellos", ha señalado.
"Pero el hecho de que asistiera Antonio David, que llevaba dos años denunciado por su sobrina en los tribunales y por los motivos que era, evidentemente sobraba. A no ser que les interesara hacer esa alianza. Y además, el gesto me parece absolutamente contrario. Había muchas razones para que no apareciera en esa boda", ha terminado sentenciando alto y claro Paloma García-Pelayo.
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