‘La Promesa’: Avance del capítulo del miércoles con un insospechado giro sobre Ayala

Alonso sigue escabulléndose de María Antonia de todos modos, mientras Cruz le cuenta a su amiga que no puede soportar la presencia de Catalina en La Promesa de nuevo. La muchacha ha vuelto de su autoexilio para intentar ayudar a su prima investigando lo que pasó antes de que se encontrara el veneno en su habitación, pero no parece dar con nada hasta que le dicen que hable con Petra. Ella tiene respuestas que lo pueden cambiar todo.

En paralelo, Lope le pide disculpas a Vera por la frialdad que ha mantenido con ella todo este tiempo y la doncella, mientras, sigue recibiendo presiones de Santos para que se comporte con una novia ejemplar. Por su parte, Virtudes se marcha en busca de su hijo y Petra, que siente que todo el mundo le oculta cosas, se enfrenta fuertemente con Rómulo, pero sin éxito. Jana ha ido a visitar a Pía nuevamente a la cueva en la que se encuentra oculta, pero su estado es cada vez es más crítico.

Mientras tanto, todos en La Promesa presionan al conde de Ayala para que no denuncie a Martina ante la Guardia Civil como así tiene previsto, y este toma una determinación completamente sorprendente. No va a dar parte a la benemérita, pero a cambio comunica un ultimátum que provocará un cisma en los Luján, pues si Martina quiere librar la cárcel, tendrá que aceptar su ingreso en un manicomio. El futuro de la joven se atisba perturbador.

Avance de ‘La Promesa’ capítulo 385 del miércoles 26 de junio

El impredecible ultimátum de Ayala provoca un terremoto sinigual en La Promesa, pues a Martina le espera o cárcel o el destierro en un loquero. El futuro de la joven es verdaderamente aciago. Sin embargo, Margarita, su madre, está dispuesta a cualquier cosa con tal de impedir que Ayala ingrese a Martina en un sanatorio. ¿Hasta dónde estaría dispuesta a llegar?

Catalina sigue indagando en el envenenamiento del conde y será Petra quien la ponga en la buena dirección para acercarse a la verdad. Una verdad que podría dejar de una sola pieza. ¿Se auto envenenó Ayala con una pequeña dosis y colocó el frasco de cicuta en la habitación de Martina para inculparla y librarse así de ella? Se avecina un giro muy grande en esta trama.

Vera y Lope cada vez están más cercanos. Santos es testigo de ello y decide llevar al límite la situación con la doncella. En paralelo, Simona se harta de esperar a Virtudes y, con un mal presentimiento, decide marchar en su busca, sin saber que la criada está a punto de llegar. Lorenzo ayuda a María Antonia para librarse de Cruz durante la tarde. ¿Su objetivo? Dejarla a solas con Alonso.