Ramón se convierte en el cuarto eliminado de MasterChef 6 con una amarga expulsión que no ha gustado a casi nadie.
Ramón era sin duda uno de los mejores aspirantes de la sexta edición de Masterchef. Este concienzudo conductor de autobuses logró entrar al programa tras seis intentos, pero el cocinado de un arroz ligeramente crudo ha bastado para su fulminante expulsión.
MasterChef vivió previamente un incumplimiento de las normas de la prueba por parte de Jon, quien se saltó la prohibición de mirar la campana que contenía la identidad del plato del equipo verde en una especie de “teléfono escacharrado” en los fogones. Cuando muchos pensaban que el jurado le sancionaría por este error, Jon arrastró a sus dos compañeros, Jorge y Ramón, a la prueba de eliminación.
Aún así, Ramón fue finalmente el expulsado tras cocinar el peor plato de arroz en la prueba de eliminación ante la incredulidad de sus compañeros, que no se podían creer lo que estaba sucediendo.
Ramón, que no podía contener las lágrimas de rabia e impotencia tras su expulsión, era rápidamente apoyado por su compañero Jorge: “Quiero decir que me parece increíble que se vaya Ramón, es un crack”.
Por su parte, Jon reconocía sentirse culpable: "Estoy roto, es como un hermano. Me tenía que haber ido yo".
Mientras tanto, Jordi Cruz era el encargado de justificar la polémica decisión del jurado: "Siempre avisamos de que hay que evitar la prueba de eliminación, porque un único cocinado malo puede expulsarte. Ramón es un buen concursante que ha estado seis años intentando entrar en este programa, y ahora ha demostrado que es un gran cocinero. Pero los errores se pagan, y él entregó un arroz crudo. No se podía comer".
Ahora queda esperar a que se haga justicia, y que la repesca vuelva a permitir cumplir su sueño a este eterno aspirante.
Sigue toda la información de El Televisero desde Facebook, X o Instagram